Este pueblo, asolado por las constantes expediciones y rayos cósmicos de visitantes extraños, se a tornado sombrío y solitario, sin personas que puedan ser observadas transitando sus solitarios y terregosos caminos. Esta impresión antigua sobre lienzo de una pieza del pintor francés Maurice de Vlaminck, muestra en su sección superior dos misteriosas naves, que ignoramos cómo o cuando pudieron aparecer sobre sus bellos y melancólicos trazos, pero despiden un verdoso resplandor que brilla sobre sus calles y tejados. Una maria luisa aterciopelada y un sólido marco de aluminio enmarcan y rematan esta pieza que despertará preguntas y miradas.
Paisaje lúgubre con ovnis
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Vendido
Con marco mide Ancho: 87 cm, Alto: 72 cm